En el día de los enamorados no todo es un camino de rosas, sino que también existen las dudas: ¿nos amamos o no? ¿Cómo lo sostenemos? ¿Seguimos enamorados? ¿Se puede mantener una pareja si no estamos enamorados? ¿Cuál es la diferencia entre estar enamorados y amar a otras personas? Son los principales interrogantes que aparecen en las crisis actuales de las parejas, según Carmina Varela, psicóloga especialista en terapia gestáltica.
En el día de San Valentín no siempre el amor es el que florece. El paradigma ha cambiado en este sentido. “Cada vez más, uno tiene más tendencia a desenamorarse, en sentido a que elige otras formas de vida. Donde ahora existe todo lo que tiene que ver con juntarse en lugar de casarse”, dice Pablo Ygel, psicólogo.
Problemas en el paraíso
Los psicólogos que trabajan con parejas aprecian cada vez más problemas. Los principales factores pueden ser culturales, económicos, diferencias de criterios familiares, infidelidades y hasta violencia de género.
El problema, coinciden los expertos, está en cómo puede lidiar cada individuo con la insatisfacción propia y de pareja.
“Las cuestiones relacionadas con la fidelidad tienen que ver con buscar fuera de la pareja eso que no se encuentra”, explica Varela. Por su parte, Ygel explica que en los consultorios se encuentran cada vez más parejas con ese problema.
El psicólogo remarca la incidencia de la tecnología en este punto: “una persona está mucho más expuesta con el uso de las redes sociales. Con un solo clic se pueden averiguar muchas cosas sobre una persona”.
La cuestión es aceptar
Muchas parejas, dice Varela, señalan a la comunicación como una de las causas de pelea. Pero el problema es que no es comunicación, sino aceptación.
“Es muy común que la mujer diga: ‘él no me escucha’, porque el hombre no cambia lo que la mujer pretende que cambie, pero no porque no haya escuchado, sino que muchas veces no tiene la misma motivación que ella o ve las cosas de manera diferente”, aclara la psicóloga.
Ygel, por su parte, clasifica a este tipo de problema como cultural. “Dependerá -advierte- de las presencia de marcas en la personalidad y la historia que cada uno de los individuos cargue”.
Este problema puede llevar a la frustración, tema que tratan de evitar las parejas. “Muchas veces la relación de una pareja implica pasar por momentos de encuentro, de rechazo, de distanciamiento. Esto produce que muchas veces se tire la toalla antes de tiempo con esta idea de que solo estaré mejor o de que se puede conseguir algo mejor”, apunta Varela.
Cambió el mito
El amor de los abuelos no es el de los padres y el de los padres no será el de los hijos.
Esto ya se puede apreciar en algunos productos y objetos de la cultura. Antes, explica Varela, el amor estaba relacionado con el amor de Romeo y Julieta: “el amor verdadero era aquel que se demostraba, que implicaba sacrificio, implicaba renuncia, espera, sufrimiento, desencuentro. Como en Romeo y Julieta”. Ahora, los cambios están a la vista de todos en las películas. “La idea es de amor como compañía. Ya no existe el príncipe azul. Aparecen personas capaces de ser compañeros del otro, en las buenas y en las malas -explica-. Tratan de demostrar que pueden ser confiables, contenedores el uno con el otro y nutrirse en las diferencias”.
El amor es capaz de mil locuras
BESOS POSTALES:
en 2015, los holandeses más románticos tuvieron la oportunidad de franquear sus felicitaciones postales con un simple beso en lugar de una estampilla. Eso sí, las cartas debían enviarse el 13 de febrero para que su destinatario las recibiera puntualmente el día de San Valentín.
BUS GRATIS:
el año pasado, la capital letona regalaba un viaje gratis en minibús a los enamorados que en el día de San Valentín se dieran un beso ante los ojos del conductor. Como la peculiar tarifa sólo regía para parejas heterosexuales, las críticas de la asociación de gays, lesbianas, bisexuales y transexuales no tardaron en llegar.
PEDIDA DE PORTADA:
el británico James Greig debió haber pensado que organizar una romántica cena para pedirle matrimonio a su novia estaba muy visto. Por eso, en 2016 se vistió de traje y, anillo en mano, posó arrodillado para una instantánea que fue directo a la portada de The Observer. “¿Quieres casarte conmigo, Katie?”, se leía al lado, en letras grandes. Según el diario, era la primera vez que prestaba su primera plana para una petición de matrimonio. Katia, como se esperaba, dijo “sí”.
AFORTUNADO EN EL AMOR...:
por comprarle una tarjeta de felicitación a su mujer para San Valentín, a un británico de 47 años no le alcanzó el dinero para el sorteo semanal de la lotería. Corría el año 1998 y cuando por la tarde salieron los números 8, 13, 14, 17, 20 y 28, la familia comenzó a dar saltos de alegría. Desafortunadamente, el padre tuvo que confesar que esta vez no había jugado.
BESOS EN MASA:
el récord mundial de besos en masa lo tiene Ciudad de México, que en 2009 reunió en su centro histórico a 39.879 personas. La cifra no es exacta, pues en los besos podían participar más de dos al mismo tiempo. A modo de motivación, los participantes contaban con las canciones románticas de Vicente Fernández.
GANE UN DIVORCIO:
una emisora de radio de Manchester quiso acabar con las edulcoradas tradiciones de San Valentín y en el año 2000 sorteó un divorcio. La pareja ganadora obtenía además unas relajantes vacaciones que, por supuesto, realizarían por separado.
Con aroma especial
Rosas, las flores del amor
“Por tradición es la que más se llevan”, señala Beatriz Borquez, vendedora. Los racimos se llevan por docena o media docena. Los precios varían entre los $ 100 y los $ 200. Individualmente, valen entre $ 20 y $ 30. Algunos puestos de venta ofrecen promociones de dos por $ 50.
PELUCHES Y TARJETAS
“Ositos”, entre los preferidos
Para los que no pasan de moda, los peluches son el regalo más caro. Los osos siguen siendo los más buscados pero ahora aparecieron animales como ranas y patos. Sus precios varían por tamaño y van desde $ 150 (los de 20 centímetros) hasta los $ 2.500 (superiores a 1,80 metro). Para acompañar este tipo de regalos, los enamorados compran tarjetas para dedicarse frases. Las cartulinas pueden costar entre $ 10 y $ 40, dependiendo del tamaño y de los dibujos.
El sabor que conquista
El chocolate, un clásico para este día
Se los puede conseguir en todos los tamaños y en todas las formas. Una caja chica de ocho bombones pueden costar $ 95 y las grandes $ 800. A manera de promoción aparecieron canastas de golosinas con peluches. Las canastas más baratas rondan los $ 1.200 y las más caras cuestan $ 2.000.
Celebración
Bendición y brindis en Barrio Sur para las parejas
La Municipalidad de San Miguel de Tucumán festejará el Día de los Enamorados con una edición especial del programa “Verano 2017 en la Ciudad”. La cita será en la plaza San Martín, ubicada en Chacabuco y Lavalle, de 18 a 21, y promete ser una jornada para enamorarse.
El cura vicario Diego Pinto, de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, bendecirá los matrimonios que asistan al lugar, durante una ceremonia religiosa que tendrá lugar a las 19.30. Más tarde habrá un brindis para agasajar y celebrar el amor de parejas recién casadas.
Spa
La oportunidad de relajarte junto con tu pareja
Para variar y cambiar la rutina del cine y de la cena, Timodella (25 de mayo 278) propone una oportunidad única para compartir con tu pareja. El spa ofrece un paquete especial para parejas. Con Club LA GACETA tendrás un 20% de descuento.
Los enamorados podrán disfrutar de un masaje quita estrés; una sesión de hidroterapia; limpiar sus poros en un sauna y otras actividades pequeñas de relajación.
La oferta sólo tendrá vigencia durante el día de hoy. ¿No te tienta la posibilidad de un San Valentín diferente?